Convulsiones (sin fiebre)

(Convulsions without fever)

¿Qué son las convulsiones?

Cuando un niño tiene una convulsión, queda inconsciente y se cae, los ojos se le van para arriba, el cuerpo se pone tieso, y los brazos y las piernas se sacuden bruscamente. La mayoría de las convulsiones duran menos de 5 minutos. Las convulsiones no causadas por fiebre ocurren en 1 de cada 250 niños. Si se hacen recurrentes, se dice que el niño tiene epilepsia.

¿Qué causa las convulsiones?

Si bien puede haber muchas causas, la más común es que una pequeña región de tejido cerebral envía de vez en cuando mensajes anormales a otras regiones del cerebro. Las convulsiones recurrentes en general se pueden controlar con medicamentos especiales (anticonvulsivos).

¿Qué tengo que hacer cuando mi hijo tiene una convulsión?

  • Deje a su hijo en el piso.

    Durante la convulsión debe dejar a su hijo en el piso. Muévalo solamente si está en un lugar peligroso.

  • Protéjale las vías respiratorias.

    Si su hijo tiene algo en la boca, sáqueselo con un dedo para que no se ahogue. Coloque al niño de costado o boca abajo para que pueda drenar las secreciones. Si el niño vomita, ayude a vaciarle la boca. Si puede, use un bulbo de goma para succionar. Si la respiración de su hijo se hace ruidosa, tire su mandíbula y mentón hacia adelante, colocando dos dedos detrás de la mandíbula a ambos lados (esto hará que la lengua se mueva hacia adelante automáticamente).

  • Errores comunes en los primeros auxilios para convulsiones.

    Cuando tenga una convulsión, no trate de controlar o parar los movimientos de su hijo. Una vez que empezó, la convulsión seguirá su curso independientemente de lo que usted haga. No trate de resucitar al niño sólo porque deja de respirar momentáneamente durante 5 a 10 segundos. Trate en vez de que las vías respiratorias queden libres. No trate de forzar nada dentro de la boca del niño. Esto es innecesario y le puede cortar la boca, lesionar un diente, causar vómitos o hacer que el niño le muerda el dedo. No trate de agarrarle la lengua. En raras ocasiones los niños pueden morderse la lengua durante una convulsión, pero no se la pueden tragar.

  • Mida el tiempo que dura la convulsión.

    Si bien no es fácil de hacer, trate de usar un reloj para medir cuánto dura la convulsión.

¿Cómo puedo cuidar a mi hijo?

  • Tratamiento para convulsiones diagnosticadas anteriormente

    Cuando la convulsión ya pasó, deje que el niño duerma si quiere. El cerebro queda momentáneamente exhausto y no gana nada tratando de mantenerlo despierto. No hace falta llevar al niño a una sala de emergencia cada vez que tenga convulsiones.

    Cuando hable con su profesional médico sobre el tratamiento de su hijo, pregúntele si le tiene que dar una dosis adicional de medicamento anticonvulsivo justo después de la convulsión para prevenir que ocurra otra. Si su hijo se olvidó de tomar recientemente una dosis de medicamento anticonvulsivo, puede ser que le tenga que dar una dosis doble.

    Los niños que toman ciertos medicamentos anticonvulsivos tienen que hacerse análisis de sangre periódicamente. Pregúntele al médico si el niño se debe hacer análisis de sangre, y cuándo.

  • Precauciones

    Si bien su hijo puede practicar la mayoría de los deportes sin problemas, trate de que no realice actividades que no serían seguras si llegara a tener una convulsión. Entre éstas se encuentran las actividades a gran altura (por ejemplo, trepar un árbol o una soga), andar en bicicleta en una carretera o nadar solo. También tendría que evitar barrenar en el viento, el buceo y los planeadores. Haga que se tome baños con ducha en vez de tina, y que sólo se bañe cuando haya otra persona en la casa.

¿Cuándo debo llamar al profesional médico de mi hijo?

Llame INMEDIATAMENTE si (para niños con diagnostico de epilepsia):

  • Las convulsiones duran más de 5 minutos.

    (Nota: Si la convulsión dura más de 10 minutos, es probable que deba llamar a una ambulancia. En general, una convulsión no causará lesiones del cerebro a menos que continúe por más de 30 minutos).

  • Las convulsiones de su hijo no están bien controladas.
  • Se produce otra convulsión.
  • Su hijo queda confundido o atontado por más de 2 horas.


Escrito por el Dr. B.D. Schmitt y el Dr. Robert Brayden.
Published originally by McKesson Health Solutions LLC.
Adapted by Premier Care Pediatrics, PA.
Este material se revisa periódicamente y está sujeto a cambios en la medida que aparezca nueva información médica. Se proporciona sólo para fines informativos y educativos, y no pretende reemplazar la evaluación, consejo, diagnóstico o tratamiento médico proporcionados por su profesional de atención de la salud.